miércoles, 13 de julio de 2011

Tres estaciones de la ZMG, en contingencia


Guadalajara. Agustín del Castillo. MILENIO-JALISCO. Edición del 18 de junio de 2011

Las estaciones de Miravalle, Tlaquepaque y Las Águilas, estuvieron ayer en contingencia fase uno por subir sus niveles de ozono a niveles superiores a los tolerados por la norma oficial mexicana en la materia.

La pluma contaminante a las 16:00 horas registró 195 puntos Imeca (índice metropolitano de la calidad del aire) en Miravalle; 165 en Tlaquepaque; y 179 en Las Águilas, por lo que se tuvo que decretar la emergencia ambiental.

La Fase I se activa cuando por un lapso de dos horas continuas se supera los 150 puntos imeca por ozono en cualquiera de las estaciones que integran la Red de Monitoreo Atmosférico. Los altos niveles de contaminación por ozono se deben a las emisiones de los vehículos en combinación con la estabilidad atmosférica, es decir, pocos vientos y alta radiación solar. Fue a las siete de la noche cuando los niveles bajaron de 150 imeca y procedió levantar la contingencia.

Los datos. Miravalle, a las tres de la tarde registró 190 Imeca, a las cuatro, 195 puntos. Tlaquepaque, 185 puntos a las tres de la tarde y 165 a las cuatro. Las Águilas, a las 15:00 horas, 158 puntos; a las 16:00 horas, 179 puntos.

Sin embargo, a las 18:00 horas la estación de Las Águilas presentaba descenso en 145 imeca, que se confirmó a las 19:00 horas, con apenas 93 puntos. En el caso de Tlaquepaque, la relación en esas dos horas fue de 123 y 116 puntos, mientras Miravalle descendió entre las cinco y las siete de la noche con los siguientes valores sucesivos de puntos Imeca: 134, 133 y 120 puntos.

Cuando se decreta la Fase I, se observan las siguientes medidas: suspender actividades deportivas, cívicas, de recreo u otras al aire libre, agilizar el tráfico en las zonas de conflicto, las industrias aplican sus planes de contingencia internos del encendido escalonado de equipos de combustión, queda prohibida la quema de cualquier tipo de material, reducción de circulación de vehículos oficiales, reducción de vehículos particulares, suspender las actividades de bacheo y pavimentación.

Mientras no se regularicen las lluvias, el problema del ozono continuará.

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