Un atisbo a la variedad arbórea de la barranca

La CEA publica libro Árboles de las Barrancas de los Ríos Santiago y Verde. En la investigación se documentaron vegetales de ornato, medicinales y frutales.

Guadalajara. Agustín del Castillo. MILENIO-JALISCO. Edición del 16 de agosto de 2011

La barrancas del río Santiago y Verde, uno de los tesoros naturales más importantes de la zona metropolitana de Guadalajara, por fin cuentan con un inventario de sus principales especies arbóreas, lo que se suma a los que se han hecho previamente sobre sus aves, sus anfibios, sus reptiles, sus mamíferos y sus insectos, y permite una idea sobre la riqueza que allí se preserva, señaló ayer el gerente ambiental de la Comisión Estatal del Agua (CEA), y coautor de la guía, Raúl López Velásquez.

“Dos de las principales características de este libro son el rigor científico necesario para que cualquier especialista que lo tuviera en sus manos pudiera juzgarlo, criticarlo y analizarlo desde una perspectiva eminentemente científica y la segunda parte fue que lo pusieran con un lenguaje coloquial para que todo mundo entendiéramos”, comentó Héctor Castañeda Náñez, coordinador de Cuencas y Sustentabilidad del organismo estatal.

Fue un trabajo de cuatro investigadores, entre ellos, Raúl López Velásquez, Miguel Cházaro, Raquel González y Hugo Covarrubias, “con el apoyo de muchas manos amigas, gente que viviendo en la zona de estudio aportó sus conocimientos ancestrales de las especies y sus usos, aprendidos por herencia de boca en boca y observación, aportando un ingrediente especial a la obra; es una investigación con tradiciones y cultura de los lugareños, que se convierte en un importante legado para las futuras generaciones”.

En el proceso de la investigación se descubrió que en estas barrancas se encuentran flores de ornato, medicinales y frutales que ya se reproducen en el Jardín Botánico de la CEA, que preside López Velásquez en esa misma zona. También se cuenta con un importante banco de germoplasma de especies endémicas, como zapote blanco, guaje y mezquite, entre otras. El jardín se instauró en el marco del proceso de impacto ambiental de la presa Arcediano, hoy cancelada.

El inventario general incluye 104 especies, 93 por ciento endémicas y el resto, “que se han ido introduciendo a través de las huertas tradicionales, como el mango barranqueño, el mamey y el zapote negro; la magnolia pugana, el palo fierro, el palo chino y el bonete”. Árboles de las Barrancas de los Ríos Santiago y Verde se publica en el año internacional de los bosques. “Esta obra es el reflejo del rostro paisajístico que podríamos tener en la zona metropolitana de Guadalajara y en todo el estado, su biodiversidad nos ayuda a conservar nuestra identidad como región”, añadió López Velásquez.