La CFE busca la anuencia de los afectados con todo tipo de artes, sobre todo malas, señala Julián López Canaré, miembro del Consejo Indígena Nayeri, que reúne a las comunidades coras de la parte alta de la cuenca.
Agustín del Castillo / Guadalajara. MILENIO JALISCO.
La gran hidroeléctrica de las Cruces, sobre el río San Pedro, principal abastecedor de agua del sistema de Marismas Nacionales de Nayarit y Sinaloa, tiene permiso de impacto ambiental, pero la Comisión Federal de Electricidad (CFE) busca la anuencia de los afectados con todo tipo de artes, sobre todo malas, señala Julián López Canaré, miembro del Consejo Indígena Nayeri, que reúne a las comunidades coras de la parte alta de la cuenca.
"Lo más preocupante es que hay una asociación civil que se llama Quinto Sol, que tiene un grupo de gente que preparó mediante varios talleres, y estos jóvenes están yendo a convencer a las comunidades mediante el ofrecimiento de proyectos y de beneficios; están diciendo que es parte de la consulta y nos preocupa que la quieran pasar por eso [...] Quinto Sol está colaborando con la CFE, sabemos que trabajan juntos, pero si la Semarnat [Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales] va a hacer pasar eso por consulta, advierto que no cubre los requisitos: debe ser previa, libre, y bien informada, y por principio de cuentas ni es previa ni es libre, porque está condicionando todo al apoyo de obras necesarias para las comunidades; nos están tratando de comprar; pero hay que decir que las comunidades ya están conscientes de las afectaciones que nos traerían si nosotros aceptamos ese megaproyecto", señala, entrevistado durante su visita a esta ciudad el pasado 23 de octubre.
El dirigente relató la intensa presión de las instituciones para obligarlos a aceptar la obra. "Esta presión se ha manifestado de diferentes formas, y una de ellas es que se ha detenido a algunos compañeros de los cuales algunos permanecen presos; es un modo en el que están tratando de amedrentar y de asustar a las comunidades para que ya no se resistan y se mantengan al margen de lo que está sucediendo".
- ¿Cuáles fueron los argumentos para las detenciones?
- Fabricaron algunos delitos, como el hecho de portar armas; en el caso concreto del comisariado de bienes comunales de Santa Teresa, él dice y asegura, y mucha gente que lo conoce sabe, que nunca ha usado arma, ni siquiera en su casa, y entonces le tomaron una fotografía poniéndole un arma a en la mano, que no era su arma; con esa fotografía lo acusan de posesión de armas, cosas así; a otros se les acusó de asociación delictuosa, pero todo conocemos a la gente y nunca ha sido así; incluso uno de los detenidos era juez de la comunidad, muy conocido; para nosotros es claro que se les está inventando ese tipo de delitos.
- ¿Todos los detenidos son opositores del proyecto?
- Exactamente, lo más curioso es eso, que son líderes de la comunidad que han estado en resistencia, contra este megaproyecto.
Los coras mantendrán su oposición y descalificarán la consulta pública que pretende hacer valer la CFE; tienen además como aliados a los pueblos mestizos de la parte baja, quienes formaron el Consejo Intercomunitario con el que acuerdan acciones de resistencia. "Sabemos que nos asiste la razón y no permitiremos que represen nuestro río, esa obra no es necesaria y tiene un alto daño para todos nosotros", subraya el líder nayeri.
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Claves
La megapresa
Su área de influencia abarcaría los municipios de Rosamorada, Ruiz, El Nayar y Acaponeta; las localidades afectadas serían: San Pedro Ixcatán, Presidio Los Reyes, San Juan Corapan y San Blasito. El área total comprende un total de 5,349 ha, de las cuales, 4,506 corresponden al embalse
Es una cortina de concreto compactado con rodillo de 188 metros de altura y planta hidroeléctrica exterior a pie de presa en el cauce del río equipada con tres grupos turbogeneradores con capacidad de 80 MW cada uno, generando un total de 751 GWh/año
La inversión será de 7,995 millones de pesos, un periodo de construcción de 49 meses, con generación de cinco mil empleos directos más otros cinco mil indirectos durante el proceso
Al cortar las aportaciones de agua y limos del río San Pedro a las Marismas Nacionales, se podría alterar la composición del pantanal costero de casi 200 mil hectáreas, como ya se ha documentado cuando el flujo del río Santiago fue cortado, hace 20 años
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