Ayer se renovó la presidencia del Consejo Ciudadano Metropolitano; la Línea 3, los planes parciales impugnados y la conurbación de Zapotlanejo, temas a seguir
Agustín del Castillo / Guadalajara. MILENIO JALISCO.
El tema de la construcción de la Línea 3 del Tren Ligero y los efectos duraderos que traerá sobre la vida urbana del corazón de Guadalajara, domina la agenda del Consejo Ciudadano Metropolitano, órgano consultivo intermunicipal del Instituto Metropolitano de Planeación (Imeplan), que ayer renovó su presidencia y estableció prioridades en la ruta de la metropolización.
Las críticas a la opacidad, a la desvinculación con el entorno urbano y al desdén del gobierno federal a solicitudes de instancias municipales y estatales, en el caso de la mayor obra de infraestructura en Jalisco en los últimos 20 años, suscita el malestar de los consejeros y de otras entidades ciudadanas, que se hicieron presentes en la sesión, en un salón del Club de Industriales.
"Debemos sostener el análisis de esta obra en el contexto y la óptica del proyecto de ciudad que se quiere construir", dijo Alfonso Gómez Contreras, presidente saliente de la agrupación, un liderazgo formal que se renueva cada seis meses. Del trazo completo de 21 kilómetros, hay áreas amplias con deficiencias de alumbrado público, de seguridad pública y de integración al espacio físico colindante, añadió.
La reunión citó a algunos prominentes ex funcionarios de Desarrollo Urbano durante los gobiernos panistas, como Claudio Sáinz David y Sergio Carmona Ruvalcaba. El segundo señaló al final de la sesión, cuando se dio la palabra a los asistentes, que el tema de los túneles es delicado porque no hay claridad sobre los efectos que pueden generar para el patrimonio arquitectónico más valioso de la conurbación.
"No podemos quedarnos con lo que han dicho, de que la tuneladora no va a generar vibraciones, y en consecuencia, daños a los inmuebles; debemos medir el estado actual de las edificaciones, algunas muy antiguas y muchas con cimentación precaria, de manera que tengamos claro que así será. Nosotros en la Sociedad Mexicana de Mecánica de Suelos [...] podemos aportar como un servicio a la sociedad, los estudios que nos permitan tener certezas sobre este asunto", dijo el ex titular de la Sedeur.
El consejo tiene entre su agenda de prioridades, la petición de una reforma que haga sus determinaciones de carácter vinculante para las autoridades responsables en desarrollo urbano; también solicita al Ayuntamiento de Guadalajara, que asuma de forma clara la defensa del trabajo que derivó en la realización de los planes parciales que han sido jurídicamente impugnados por agrupaciones vecinales integradas en el Parlamento de Colonias; que se realice un atlas de riesgos urbanos y naturales y que se integre un plan para volver a ocupar más de 100 mil viviendas solas que hay en los municipios metropolitanos, sobre todo en el centro tapatío y en la periferia.
Propone se establezca en la planeación la prioridad de un manejo integral de las aguas de la ciudad: la protección de su recarga, el aprovechamiento del agua pluvial, el manejo de las cuencas y el saneamiento de las aguas residuales; alcanzar la gestión completa de los residuos sólidos, la captura de gas metano y programas de reducción de emisiones a la atmósfera.
Los consejeros también asumirán la integración, decidida por los diputados locales, del municipio de Zapotlanejo como el número nueve del área metropolitana, con todos los problemas y riesgos que ello plantea ante la acelerada expansión de la mancha urbana por negocios inmobiliarios que presionaron para detonar proyectos al oriente de la barranca del río Santiago. A Alfonso Gómez lo relevó en el cargo Federico González Martínez, los siguientes seis meses.
Prodeur, en la mira
El consejero Ricardo Alcocer, denunció ante el pleno del Consejo Ciudadano Metropolitano, que se han puesto complicados los asuntos internos de la Procuraduría de Desarrollo Urbano (Prodeur), que preside Gabriel Ibarra Félix, de acuerdo a quejas que le hicieron llegar empleados de la institución. Pidió a los consejeros mantenerse vigilantes del proceso de renovación del procurador, porque podría darse una sorpresa contraria al sentido común, si el “cuestionado” procurador negocia con los diputados que le renueven en el cargo, no obstante la ausencia de la institución en los grandes debates urbanos de la ciudad, y sus carencias en la defensa de los ciudadanos que reclaman violaciones a sus derechos de gozar una ciudad digna.
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