El Congreso negó ajustes en leyes de ingresos de los 125 municipios para 2012. La CEA y el SIAPA señalan que la decisión fue electoral y profundizará la crisis de los operadores
Guadalajara. Agustín del Castillo. MILENIO JALISCO
El camino a la sustentabilidad financiera de los organismos de agua potable de Jalisco ha sido de nuevo bloqueado: los diputados han impuesto, por otro año, la contención total de las tarifas. Esto deja en cero pesos los aumentos en el servicio en las leyes de ingreso de los 125 municipios de la entidad, que ya arrastraban uno o dos periodos anuales sin aumentos: “Se debe a decisiones político-electorales y no técnicas”, coinciden los directores de la Comisión Estatal del Agua, César Coll Carabias (CEA) y del SIAPA, José Luis Hernández Amaya.
Parece un tema ya cerrado, pero existe la posibilidad de que el gobernador del estado no publique las leyes, hasta que se acuerde un incremento que permita solventar necesidades urgentes, añaden.
“Es de todos conocido que los municipios tienen precariedad en sus finanzas, respecto a las inversiones que tienen que hacer por el rezago acumulado. Algunos de ellos, por segunda vez, no van a tener aumentos y algunos hasta por tercera ocasión. Eso hace que el ayuntamiento tenga que subsidiar el servicio, pero como tiene una bolsa de dinero prácticamente fija, el problema está en que va a demeritar los otros servicios, llámese basura, seguridad, policía”, explica Coll Carabias.
“Al tomar esta decisión, el Congreso definitivamente los golpea, llega un momento que es ya muy fuerte. Por ejemplo, Zapotlán el Grande: ellos subsidian, anualmente, con alrededor de 25 millones de pesos, e imagínate lo que representa para ellos en su presupuesto; al negarles el aumento solicitado, estamos hablando de cerca de un millón y medio de pesos más, que se van a tener que subsidiar, por la inflación”.
Por su parte, Hernández Amaya lo considera un severo golpe al SIAPA: “Realmente es una mala noticia para la institución, pero también para los usuarios, para nuestra ciudad, porque dejas de invertir, dejas de tener la oportunidad de crecer, de modernizar el suministro, de tener proyectos que nos den una mejor atención y una calidad de agua mejor, [...] esto nos va a obligar a redoblar todos los esfuerzos que hemos venido haciendo en los dos últimos años que hemos estado al frente de la institución, con base en recursos propios, no con tarifas ni con subsidios; en administraciones anteriores se dieron por el gobierno del estado al organismo, y esta administración no hemos tenido ni un centavo de subsidio de parte del gobierno del estado ni de los municipios, excepto Tlaquepaque, que nos dio once millones de pesos para inversión”.
La CEA elaboró propuestas tarifarias para 2012 en 33 municipios, que incluían alzas de entre 4 y 8 por ciento (ver gráfico anexo), con base en su situación específica. No es lo mismo sacar el agua a seis metros, como en Cihuatlán, que a 70, como en Los Altos. Además, los costos de la potabilización varían según la calidad de la fuente de abastecimiento. Sin embargo, ninguna la aprobó el Congreso.
“A raíz de las campañas electorales de 2009, hubo un partido que, dentro de sus ofertas, dijo que no iba a subir el agua, que es el partido que tiene la Comisión de Hacienda en el Congreso; cuando entró la nueva Legislatura, han tomado sus decisiones con base en ese eslogan, perjudicando las finanzas que se tienen”, añadió Coll Carabias. Un ejemplo claro es Puerto Vallarta, al que cada aumento negado, sólo en inflación, le ha costado quince millones de pesos anuales.
El funcionario señala que en los ayuntamientos hay una representación pluripartidista que avala los aumentos, “pero Jalisco es uno de los nueve estados en que se está forzando a pasar por el Congreso la autorización de las tarifas”, lo que lo condena a una “partidización” permanente.
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