miércoles, 30 de diciembre de 2009

La Primavera y el río Ayuquila, los damnificados del presupuesto 2010


Lo que se pide: $18 mdp para el principal pulmón de la ciudad y cuatro mdp en la cuenca. Sólo el valor de mercado del agua que genera el bosque va de 120 a 1,200 mdp; en la cuenca, sus servicios ambientales generan más de mil mdp en producción agropecuaria; pero no les asignaron un peso

Guadalajara, Agustín del Castillo. PÚBLICO-MILENIO, edición del 21 de diciembre de 2009

"Cero pesos”, es el valor que le asigna al bosque La Primavera y a la cuenca del río Ayuquila el presupuesto del gobierno de Jalisco para 2010, aprobado hace semana y media por los diputado locales, previa propuesta del Ejecutivo.

Si tan sólo se pagaran a valor de mercado los servicios ambientales que generan ambas demarcaciones, podrían disponer de entre 500 y mil millones de pesos por anualidad.

No obstante, lo que se pide para la gestión y mantenimiento de ambas zonas es pequeño frente al enorme beneficio que otorgan: 18 mdp en el caso de La Primavera, y cuatro millones en el caso de Ayuquila.

Este gasto se cubriría con los dos millones de dólares que el gobierno de Emilio González Márquez ha entregado, a fondo perdido, para la celebración, en los dos últimos años, del Lorena Ochoa Invitational, torneo internacional de la famosa golfista tapatía. O bien, con los ingresos de 20 funcionarios de primer nivel del gobierno, que reciben alrededor de 1.2 millones de pesos anuales de salario cada uno. De hecho, representa apenas 0.003 por ciento del gasto autorizado para 2010, de 60 mil millones de pesos. Pero de por sí, el presupuesto ambiental del ejercicio que viene es uno de los más bajos de la historia: 104 millones de pesos por medio de tres secretarías —descontado el gasto corriente—, más cerca de 500 millones más para el saneamiento de la zona metropolitana. Y nada más. Escaso 1 por ciento del presupuesto (ver nota anexa).

Las negociaciones, tras el escándalo suscitado al conocerse la propuesta aprobada, han avanzado poco en el Congreso del Estado, bajo la tutela del diputado del Partido Verde, Luis Manuel Vélez Fregoso. Si no saliera adelante alguna modesta asignación, ambas entidades deberán recortar personal, cancelar proyectos y esperar que alguna secretaría pague siquiera los salarios de su personal. Y el tema ambiental, pese a la enorme crisis mundial, relegado al sótano de las prioridades. Una vez más.

Servicios que nadie paga
El agua es el servicio ambiental más fácil de medir. Su valor oscila entre 30 centavos por metro cúbico que cobra la Comisión Nacional del Agua a los concesionarios del valle de Autlán, a los cinco pesos que por los mismos mil litros cobra el SIAPA en la zona metropolitana de Guadalajara.

Otros servicios ambientales son más difíciles de valorar en términos económicos, pero considerados en conjunto, duplican fácilmente la cifra estimada: son servicios tales como la captura de carbono; la preservación de especies valiosas para la vida humana como parte de la cadena alimenticia, control de plagas y medicinas; la posibilidad de un amplio espacio de recreación para decenas de miles de tapatíos o de habitantes de las ciudades medias de las regiones Amula, Costa Sur e incluso el estado de Colima (que al minimizar el estrés, previene enfermedades cardiovasculares), lo que a su vez deriva en menos servicios hospitalarios y menor ausentismo laboral; el mejoramiento del clima local —algunos estiman que sin La Primavera, la ciudad tendría dos grados más de temperatura, con todo lo que significa en términos de enfermedades, contaminación del aire y escasez de agua—; y la prevención de desastres (en la sierra se contiene agua y se retiene suelo que en la cuenca baja multiplicaría daños a las comunidades humanas y dañaría a la agricultura).

Pero estos datos no son relevantes para los tomadores de decisiones. Así lo demuestra la cancelación del de por sí magro recurso de siete millones de pesos que recibiría La Primavera por medio del fideicomiso que financia sus actividades sustantivas, el cual suele ser entregado por la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder) y que estaban contemplados en el proyecto de presupuesto 2010 del Ejecutivo, que fue modificado por legisladores y funcionarios de la Secretaría de Finanzas y dejaron en cero el apartado; pasa lo mismo con los cuatro millones que se esperaban en el fideicomiso para la Junta Intermunicipal para la Gestión Integral del Río Ayuquila, pese a tratarse de uno de los más importantes experimentos de gestión ambiental a nivel cuencas que hay en el país.

Dentro del concepto “instituciones sin fines de lucro” (código 4304 del gasto de esa secretaría), con 18 millones 20 mil pesos, se prevé financiar otras dos áreas naturales protegidas, sin duda relevantes para el estado: sierra de Quila (Comité Regional de Protección, Inspección y Fomento de los Recursos Naturales de la Sierra de Quila AC), con seis millones de pesos; y el parque nacional Nevado de Colima (patronato del Nevado de Colima y Cuencas Adyacentes AC), con apenas cuatro millones de pesos.

Según los ejercicios de planeación que se han realizado en el bosque de la región metropolitana de Guadalajara, una cantidad mínima para garantizar su operación básica es de 18 millones de pesos anuales, dinero que nunca ha estado disponible. La Administración de Emilio González Márquez intentó en 2007 pasarle a la sociedad la estafeta del financiamiento introduciendo un concepto de pago por servicios ambientales en la cuota de agua que se paga al SIAPA, pero la irritación ciudadana por la entrega de subsidios a actividades y asociaciones que sí persiguen lucro, o que no tienen objetivos de beneficio colectivo, hicieron que la tentativa fracasara.

Estos días serán decisivos para ambas demarcaciones. Lo cierto es que hasta ahora, los políticos de Jalisco han logrado lo que nadie en doce años: reducir a cero el gasto para un bosque que da vida a la segunda zona metropolitana del país, y para una cuenca que ofrece un modelo de desarrollo a bajo costo único en México.
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Sobre los servicios ambientales

Según el Instituto Nacional de Ecología (INE), asciende a 11,300 millones de dólares cada año el costo para el país por enfermedades, muertes y problemáticas relacionadas con la mala calidad del aire, la escasez de arbolado y el uso de combustibles fósiles

El mismo organismo calcula que en las tres zonas metropolitanas del país: México, Guadalajara y Monterrey, se registran alrededor de siete mil muertes anuales relacionadas con la contaminación que generan los vehículos

Pero a los servicios de los ecosistemas se les da valor a partir de que se pierden, como ocurrió con el devastador incendio forestal de abril de 2005, en que el carbono liberado desde La Primavera invadió la ciudad, causó más de cuatro mil consultas médicas, ausentismo laboral y escolar

Dependen de las recargas del bosque La Primavera ocho presas, siendo las de mayor capacidad la presa de La Vega (44 millones de metros cúbicos) al oeste, y las presas de Hurtado (22 millones de m3). Así mismo, en la región de influencia existen aproximadamente 1,158 pozos, 57 manantiales y 452 norias de importancia vital para los pobladores del área, entre ellas Los Colomos, de donde se abastece agua para 70 mil moradores del poniente citadino

El bosque durante el año se mantiene una temperatura de 20.6 centígrados, lo que favorece a la región que lo rodea. Se estima que la ciudad tendría dos grados más de temperatura sin La Primavera

Si se pagaran servicios ambientales de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) en las 35 mil ha boscosas —florestas templadas y bosque tropical caducifolio— a un tope de 400 pesos por ha, se tendrían que pagar catorce millones de pesos anuales

Aparte es la cuestión del agua; el costo a 50 centavos por m3 da 120 millones de pesos anuales, pero si se aplica el costo de agua potable (la calidad del agua del acuífero es óptima), y se cobraran cinco pesos por m3 que el SIAPA cobra en promedio a los habitantes de la ZMG, da 1,200 millones de pesos anuales

En cuanto a la cuenca del río Ayuquila, de poco más de 3,500 kilómetros cuadrados (350 mil ha) de extensión, según el Inventario Forestal Nacional de 2000, en la zona se distribuyen 98,839 hectáreas de bosques templados y 112 mil ha de selvas tropicales caducifolias o selva baja; si estas superficies de bosques y selvas, primarios y secundarios (es decir en buen estado de conservación), fueran integrados en su totalidad al Programa de Pago por Servicios Ambientales de la Conafor, deberían ejercerse 39 millones 535,600 pesos, considerando un pago de 400 pesos por hectárea, para mantener los bosques templados, y 33 millones 600 mil pesos, considerando 300 pesos por ha, para mantener las selvas bajas

En materia hídrica, la cuenca capta en sus presas y bordos aproximadamente 600 millones de m3 (27% del total captado en todo Jalisco), que son destinados para riego en los valles agrícolas de Autlán-El Grullo y Armería, en Colima; para éste último se destinan 145 millones de m3

Este volumen representa, de acuerdo con las tarifas de agua concesionadas por la Comisión Nacional del Agua, 180 millones de pesos a razón de 30 centavos por m3; si bien, en el ciclo 2007-2008 la CNA percibió ocho millones 625,705 pesos del distrito de riego de El Grullo, el ingreso total por venta de caña de azúcar/ha, que fue posible gracias a esta disponibilidad de agua, ronda en 539 millones 280 mil pesos, considerando datos oficiales de precio por hectárea de caña de azúcar (428 pesos) y un máximo de producción de 90 toneladas por hectárea —dato conservador para el valle Autlán-El Grullo—

Fuente: Investigación científica sobre La Primavera, UdeG/Iteso; dirección ejecutiva del bosque / Junta Intermunicipal del Río Ayuquila

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Apenas tendrá la dependencia estatal 11 millones de pesos para protección, conservación y preservación ecológica

Semades y los proyectos ambientales, los patitos feos

La secretaría es la que menos presupuesto tiene y se lo bajaron 30%.


En el presupuesto original para 2010 que mandó el gobernador a los diputados, que incluía una deuda cercana a tres mil millones de pesos, la Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) se mantenía como la de menor presupuesto de todo el Ejecutivo, con poco más de 130 millones de pesos. Ahora, el milagro de las reasignaciones no modifica su lugar, pero reduce en 30 por ciento el dinero a ejercer el próximo año.

De casi 98 millones de pesos previstos para la Semades para 2010, 60.7 millones irán al pago de salarios, de aguinaldos, de primas vacacionales, de seguro, de impuestos, de vivienda y de fondo para el retiro.

Otros cuatro millones 323,975 pesos son para materiales, utensilios, refacciones, parque de vehículos, combustible y vestuario, entre otros.

Se pagan tres millones 867,280 pesos de rentas de edificios; 822,640 pesos de servicio telefónico; 826,640 de electricidad y dos millones 571 mil pesos de impresiones de papelería oficial, entre otros conceptos, para un total de 22 millones de pesos en dos capítulos más de gasto.

¿Qué queda para invertir en el ambiente? Diez millones de pesos para infraestructura de protección, conservación y preservación ecológica, más un millón destinados a “fomento de actividades de protección, conservación y preservación ecológica”.

Por cierto, no hay ningún rubro destinado a la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa), la cual operó en 2009 con unos quince millones de pesos de presupuesto.

En cuanto a la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder), además de 18 millones 20 mil pesos a “instituciones sin fines de lucro” (dentro del cual, los grandes ausentes son el bosque La Primavera y la Junta Intermunicipal del Río Ayuquila, ver nota principal), prevé un fondo de doce millones de pesos para “fomento de actividades de protección, conservación y preservación ecológica” cuyo destino no aclara el documento.

En cuanto al gasto de la Secretaría de Desarrollo Urbano, el capítulo de “desarrollo de infraestructura del sistema agua” tendrá 1,260 millones 994,200 pesos, y abarca el proyecto de abastecimiento y el de saneamiento de la zona metropolitana de Guadalajara.

La Sedeur le da diez millones 307,620 pesos al parque de la Solidaridad y trece millones 191,480 pesos al Metropolitano. Un área menor a 200 hectáreas recibe así 117,500 pesos por hectárea, en contraste con los 590 pesos por hectáreaa los que aspira La Primavera, y los cero pesos por hectárea que en realidad le dieron al bosque.

Aparte, se dan de la Sedeur 40 millones de pesos para el “saneamiento integral para la población de Cajititlán” (sic), referido al mejoramiento del embalse, que recibe miles de litros de aguas negras por día.

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