El Zoológico Guadalajara donó parte de los ejemplares que se soltaron ayer en el área natural, a los que agregará más.
Agustín del Castillo / Guadalajara. MILENIO JALISCO
El Lynx rufus emite gruñidos agresivos y pela sus grandes ojos, molesto ante la amplia ronda de curiosos que se asoman a su pequeña jaula con cámaras y flashes, pero eso indica que está preparado para insertarse de nuevo a la vida salvaje. Es el regalo principal para el bosque La Primavera, que hoy cumple 32 años de haber sido decretado por el presidente de la república como área natural protegida.
El lince no sabe que se mete entre ecosistemas que viven riesgos críticos por la tendencia al aislamiento a que parecen condenarlos las carreteras y los fraccionamientos que crecen desde la ciudad, devorando todas las formas de vida que no sean humanas y su corte de mascotas o plagas. También desconoce que se tiene la esperanza de saber por más de un año sus movimientos a lo largo de esta sierra, la eventualidad de que salga del polígono de protección o incluso tener certeza de su eventual muerte, por causas naturales o de los dominantes cazadores de la especie que, en griego, es “sabia” (sapiens sapiens).
Esto último es el fruto del último proyecto que ha seguido la dirección ejecutiva de la reserva federal, en particular de su área de conocimiento, que preside la bióloga Karina Aguilar Vizcaíno. Se ha conseguido equipo de telemetría con un costo cercano a 30 mil pesos y se han puesto collares en este hermoso gato montés y en un alegre macho de venado cola blanca (Odicoleus virginianus), que también se regaló al área de protección de flora y fauna, en este caso, desde los criaderos del Zoológico Guadalajara, que donó ese y otro ejemplar del famoso venado de Virginia, lo cuales, ayer por la noche ramoneaban en el sotobosque, alertas de los movimientos del famoso depredador que es el único que los puede matar en esta zona, además del hombre: el Puma concolor .
La fiesta de La Primavera ha comenzado. Ayer “se liberaron 22 ejemplares de fauna silvestre, entre venados, lince, zorra, serpientes, tortugas y mapaches, y, por primera ocasión, se podrá monitorear el éxito o fracaso de esta liberación en algunos ejemplares, gracias al uso de collares de telemetría convencional”, explicó el director del Centro Integral de Vida Silvestre de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (CIVS Semarnat), Andrés González Rodríguez.
En el curso de la semana, llegarán ocho venados más del zoológico: “La idea es enriquecer genéticamente al bosque, pero debemos entender que de poco servirá si no logramos mantener abiertos los corredores biológicos”, precisa Aguilar Vizcaíno; la mayor amenaza en el corto plazo es una carretera de cuota denominada macrolibramiento de Guadalajara (ver nota aparte), a la que se agregan carreteras existentes que no respetan en lo mínimo el flujo de especies desde las zonas vecinas al bosque. Un lince desconfiado que se pierde en una barranca, un venado saltarín que remonta la ladera con garbo, una serpiente sigilosa que se oculta en la hojarasca, entre muchos más, agradecerán el esfuerzo.
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Claves
Más datos
► El recuento de los animales liberados ayer: dos ejemplares de cola blanca, cuatro serpientes alicantes, una víbora de cascabel, una serpiente chirrionera, una iguana negra, un lince, un zorro, cuatro mapaches, cinco tortugas casquito y dos cenzontles.
► Tres de los mapaches provenían de una unidad de manejo ambiental y vida silvestre del municipio de Colotlán, y son nietos de animales que hace algunos años fueron trasladados desde el CIVS de Guadalajara como donación.
► Ocho venados más llegarán en el curso de esta semana, procedentes del Zoológico Guadalajara.
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