Usuarios de los equipos no regularizados de un proveedor han protestado por la medida y por cobro para actualizarlos. No cubrieron requisitos de regularización y actualización de los equipos alrededor de 20% de los establecimientos, dice la Semades
Guadalajara. Agustín del Castillo. MILENIO-JALISCO. Edición del 5 de octubre de 2011
Mañana se vence el plazo para que los 726 talleres acreditados en el programa de verificación vehicular tengan sus equipos verificadores regularizados y actualizados. Los datos de ayer revelan que 119 talleres, 17 por ciento del total, no cumplen requisitos y pueden quedar fuera de línea en las próximas horas, informó la directora del programa en la Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades), Dulce García Bogarín.
La funcionaria explicó que en los últimos meses se han debido someter los talleres a un proceso intensivo de cambio, tras determinarse que los equipos adquiridos a partir de 2008 no cumplían numerosos requisitos indispensables para la seguridad de los datos y para evitar fraudes. Por ello, se estableció la necesidad de una regularización y de una actualización.
“El 6 de octubre [de 2010] tuvimos una primera sesión de trabajo con todos los proveedores de equipo, y les dijimos claramente que íbamos a hacer una revisión técnica de todos sus equipos, por lo menos cuatro inspecciones aleatorias, para así determinar en qué condiciones estaban. Hicimos todas esas revisiones que nos llevaron hasta principios de diciembre, y de ahí emitimos una serie de lineamientos que fueron notificados a cada uno de los proveedores, reporte de anomalías donde les hacíamos la identificación de la gravedad de la irregularidad, por ejemplo, si contaban con los dos discos duros o espejo, que es el respaldo de la información; si se tenia acceso al sistema operativo —esta deficiencia es grave porque podría ocasionar manipulación de la información—; y muchos más ejemplos”, explicó García Bogarín.
“Ningún proveedor pasó a 100 por ciento la prueba, y tenían la obligación de regularizar la situación en 30 días hábiles”, pero se fueron concediendo prórrogas, la última de las cuales vence mañana. La regularización sería sin costo para el particular, según lo establecido en el acuerdo gubernamental que originó el programa, que fue publicado en el periódico oficial El Estado de Jalisco, del 19 de abril de 2008.
Después vendría una actualización con cargo a los talleres cuyo costo fue homologado en alrededor de seis mil pesos, situación que inconformó a muchos, especialmente a quienes compraron el equipo más barato, de la empresa Dr Tool, representada en Jalisco por Arturo Medina Zambrano y cuya propiedad es de Miguel de la Fuente, según los registros de la Semades.
Trascendió que de todos los proveedores, Dr Tool fue el que más demoró en cumplir, debido a problemas internos entre el proveedor Medina Zambrano y el fabricante, De la Fuente. Tras diversos jaloneos, desde julio pasado, la empresa desconoció a Medina y comenzó a hacer directamente las actualizaciones. De poco más de 200 equipos, ya han puesto al día 169, que forman parte de los que se mantendrán en servicio con el corte de esta medianoche.
Usuarios de los equipos no regularizados de Dr Tool han protestado por la medida y por el cobro de la actualización, y aseguran que es negocio de la Semades, pero García Bogarín lo desmiente: el costo de la actualización lo hacen los proveedores. Y no hay marcha atrás en la suspensión que imperará para el que siga reacio a ponerse al día.
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Forman asociación para oponerse a Semades
••• Está en trámite una asociación de talleres que se oponen a las políticas de la Semades en materia de verificación vehicular. María Angelina Martínez Martínez dijo que los cobros por actualizaciones son caros y que se pretende afectar a su proveedor principal, Arturo Medina Zambrano, a quien elogió por dar el servicio más barato y los equipos más asequibles.
En entrevista con este diario, la propietaria de un taller en Tlajomulco dijo que no le quedó de otra que pagar su actualización, pero que pugnará legalmente por evitar que siga adelante el programa en su forma actual porque afecta severamente los intereses económicos de los talleres.
“Más de 200 personas compramos máquinas con el señor Medina, nos dio facilidades y nos apoyamos en créditos de Fojal que todavía estamos pagando; los de la Semades nos amenazaron con que teníamos que hacer el pago de la actualización de 5,800 pesos más IVA, cuando el precio justo son 900 pesos, y ya estamos amenazados de que nos van a bloquear el servidor”, refirió Martínez.
El movimiento que encabeza Martínez Martínez exige una nueva prórroga de 90 días; homologar a 900 pesos la actualización de los equipos; y el despido de los funcionarios de la Semades responsables del programa “porque no son neutrales”.
Otra queja la dio el particular Mario Medina Zambrano, quien busca abrir un centro de verificación en Villa Corona, pero señala que los problemas personales con su hermano hacen que no se emita el permiso, pese a que cumple los requisitos.
Sobre este último asunto, Dulce García Bogarín, la responsable del programa, señaló que pronto se hará una inspección al lugar donde está enclavado ese taller y se hablará con los vecinos para determinar si es posible integrarlo a la red de verificación, primer paso antes de la autorización del equipo: “Aquí no hay nada personal, es simplemente exigir el cumplimiento de la ley”, respondió.
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