Luege señala que ecologistas “engañan” con sus comparaciones internacionales, que se trata de una infraestructura indispensable para seguir desarrollando el país. México apenas ha regulado 30% de sus ríos, asegura por su parte el director de la AMH
Guadalajara. Agustín del Castillo. PÚBLICO-MILENIO
La Comisión Nacional del Agua (CNA) y la Asociación Mexicana de Hidráulica (AMH), denunciaron la campaña de “engaños” por parte de organismos no gubernamentales de corte ecologista y de derechos humanos, al denostar la política mexicana de construcción de presas cuando estas son necesarias para el desarrollo del país, sostuvieron los titulares de ambos organismos, José Luis Luege Tamargo y Humberto Marengo Mogollón.
Entrevistados en el reciente Congreso Nacional de Hidráulica, que se realizó en esta ciudad, el funcionario y el líder gremial –respectivamente- señalaron que el encuentro de afectados por represas de Temacapulín, realizado a comienzos de octubre, no considera los diferentes niveles de desarrollo y las oportunidades de México frente a sus socios de la Organización Mundial del Comercio (OCDE, por sus siglas en inglés), contra los que se le suele comparar.
“No tiene comparación, es una forma de engañar realmente muy hábil; hay zonas planas de Europa donde no puedes tener presas, y hay una discusión sobre el impacto ambiental de una presa, que desde luego tiene sentido desde el punto de vista científico, y que se resuelve precisamente con las evaluaciones del impacto ambiental y las acciones de mitigación; toda obra que se realice sobre la faz de la tierra tiene que tener un impacto ambiental, el tema de las grandes obras de infraestructura es cómo mitigar ese impacto ambiental, porque tú tienes una obra necesaria para abastecimiento de agua, para riego agrícola, para la generación de energía eléctrica, pero por otro lado puedes tener una afectación al medio ambiente y los ecosistemas; entonces los estudios de impacto ambiental te obligan a la mitigación, que es lo que no dicen estas personas, no dicen que la generación de energía eléctrica en una hidroeléctrica es mucho más limpia que en termoeléctrica o la nucleoeléctrica, por ejemplo”, dijo Luege Tamargo, titular de la CNA, organismo público descentralizado.
Por otro lado, “los países desarrollados ya desarrollaron toda su infraestructura, toda su red hidráulica, son países que tienen 80 o 90 por ciento de su regulación hecha; así, ya les es muy fácil decir no voy a hacer mas, el Danubio tienen 29 mil megawatts instalados en nueve países, y nosotros en el Usumacita no tenemos ni un kilowatt, no tenemos nada, y a nivel nacional tenemos apenas 30 por ciento de la disposición de los recursos hidráulicos hecha, entonces es muy fácil hablar cuando ya se desarrollaron ellos”, secundó Marengo Morollón.
Así, “ya desarrollaron toda su infraestructura, y nosotros apenas estamos en eso, y vienen a criticarnos sin ninguna calidad moral”.
- ¿No cree que nos ha fallado como sociedad el crear modelos de vida menos consumistas, menos necesitados de energía, más racionales en el uso de los recursos?
- Desde luego que nosotros debemos entender que la humanidad requiere un uso racional de la energía y del agua, y las campañas del gobierno federal van en este sentido, y en los consumos de energía si nos comparamos allá arriba con los estadounidenses tenemos 20 veces menos [sic].
- Pero pareciera que queremos llegar a ser como ellos…
- No, las comunidades rurales y las comunidades indígenas viven con un consumo mínimo, y el problema del desperdicio del agua en las grandes urbes es un problema en el que la CNA ha estado insistiendo; pero en el tema de la energía eléctrica creo que no, están todas estas campañas de ahorro de energía, del cambio de las lámparas, de los sistemas […] entonces yo creo que van bien esa campañas, en el tema del agua como el costo del agua es tan relativo, pues mucha gente al desperdicia por ignorancia o por falta de cuidado, y en el tema del agua si queremos campañas de uso racional y de uso más eficiente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario