Los consejeros ven con buenos ojos ampliar el ANP, pero insisten en que se debe prohibir estrictamente el turismo en la zona terrestre.
Agustín del Castillo / Guadalajara. MILENIO JALISCO.
El consejo asesor de la reserva de la biosfera Archipiélago de Revillagigedo ha alcanzado un consenso definitivo sobre el aspecto más polémico de la iniciativa de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, para el cambio a parque nacional de ese conjunto de islas del Pacífico mexicano: la prohibición estricta de actividades turísticas, "así sean de bajo impacto", en la porción terrestre.
Esto derivó de un análisis realizado a la versión electrónica del anteproyecto de decreto, en el cual sigue sin retirarse esa posibilidad, lo que inquieta tanto a científicos como a activistas ambientales por sus posibles consecuencias.
En un comunicado dirigido a César Sánchez Ibarra, director general de conservación de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), fechado el pasado 3 de noviembre, los consejeros puntualizan: "destaca el hecho de que la mayoría (...) consideran que debe quedar explícitamente restringido el turismo, así sea de bajo impacto, en la porción terrestre de las islas que componen el archipiélago Revillagigedo. La opinión general es que el turismo en la zona núcleo no debe ser permitido. Se presentan elementos que fundamentan adecuadamente este punto, en el sentido de los altos riesgos del turismo para la estabilidad a largo plazo de los ecosistemas insulares, y por lo tanto implican un riesgo al reciente reconocimiento" como patrimonio de la humanidad.
Otro aspecto –sigue el documento, del cual MILENIO JALISCO tiene copia- "que no se considera en el anteproyecto de decreto es la estructuración de un programa de investigación de largo plazo en el archipiélago (...) el cual permitirá incrementar el conocimiento del área natural protegida, la biodiversidad existente en ella y poder contar con una base de datos ambiental, así como evaluar el riesgo geológico, a fin de determinar la integridad ecológica y los cambios y sinergias relativas al cambio climático".
Los consejeros celebran el incremento de superficie marina del nuevo decreto, prácticamente adquiere 14 millones de hectáreas de mares mexicanos para excluir pesca y otras actividades extractivas, como un compromiso real para preservar procesos naturales únicos y que significan la conservación de patrimonio de relevancia mundial e incluso una inversión a largo plazo a favor de actividades que si son reguladas, como la pesca, pueden derivar en un desarrollo sostenible.
Esta declaración formal se da apenas unos días antes de que comenzara la VI Reunión Internacional de los Investigadores del Archipiélago Revillagigedo, que arranca el día de hoy y termina el jueves 10 de noviembre en la capital del estado de Colima, entidad federativa a la que está adscrito territorialmente el archipiélago. La reunión cita a los especialistas en vida marina e insular que han trabajado en la zona, y permite un corte en el estado de las investigaciones que documentan la riqueza biológica, los procesos ecológicos y las posibilidades de manejo para restauración o conservación de los ecosistemas.
Apenas dos días antes de este comunicado, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales emitió uno propio, para informar que en el marco de la Reunión 54 Extraordinaria del Consejo Nacional de Áreas Naturales Protegidas, presidida por el titular de la Semarnat, Rafael Pacchiano Alamán, "los consejeros manifestaron su respaldo (...) para sacar adelante el decreto de Parque Nacional Revillagigedo por considerar que es medida más adecuada para garantizar a perpetuidad la conservación de este sitio". Este consejo aludido es el general de la Conanp, y es una instancia distinta al consejo asesor, que es específico del área protegida en mención.
"En términos de los artículos 50 y 51 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, la intención del decreto es prohibir totalmente la pesca en todo el polígono del Parque Nacional de Revillagigedo, y de acuerdo con los artículos 47 BIS, 47 BIS 1 y 50 de esta misma Ley, designar como zona núcleo de protección sus casi 14.8 millones de hectáreas, tanto en su posición marina como en las islas (...) la Semarnat reitera que la figura de Parque Nacional Revillagigedo garantiza una protección suficientemente estricta al establecer la prohibición de la pesca como principio fundamental de manejo en todo el polígono. Así mismo, podrá movilizar y atraer financiamiento y apoyos nacionales e internacionales, tanto privados como públicos y multilaterales, para destinarlos a su manejo y vigilancia".
No hay ninguna manifestación explícita al tema del turismo. Y en el anteproyecto, la posibilidad sigue abierta. Para los consejeros de la reserva, es dejar abierta una caja de pandora.
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Claves
Bueno y malo
"Muy buena noticia la ampliación de la zona núcleo (...) antes definida solo en zona terrestre del archipiélago, a un polígono marino de 14.8 millones de hectáreas, lo cual fortalece la protección de una inmensa diversidad de especies marinas que habitan el área y se asegura una zona de protección para los atunes, lo que posibilitará una derrama (spillover) positiva hacia áreas de pesca fuera del polígono protegido. Esto, a pesar de los reclamos de empresarios atuneros mexicanos 'porque se les reducen sus zonas de pesca'. ¡Pescan en una vastísima zona del Pacífico Oriental tropical! En el polígono propuesto para Parque Nacional solo pescan el 3.7% de sus capturas totales..."
"Muy mala noticia la apertura de la zona terrestre de estas islas al turismo, grave amenaza a la integridad de sus ecosistemas, que se encuentran en fase de recuperación y restauración gracias a los esfuerzos de diversos investigadores científicos y organizaciones de la sociedad civil (...) se ha logrado erradicar especies invasoras como borregos, cabras, cerdos, gatos, ratas y ratones, que destruyen y extinguen flora y fauna local y restaurar los valiosísimos y únicos ecosistemas insulares de México".
FUENTE: blog de Germán González Dávila, Ceiba
SRN
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